Cada día viajo a una parte del mundo que desconozco por completo, pero no me siento nada perdido, cada dia viajo a los mimos sitios, pero nunca son iguales que el día anterior.
Esos 5 minutos que el rostro se paralizada, los ojos se centran en un punto infinito sin horizonte, con el fin hacer una pantomima del cuerpo con alardes de estar presente, la mente se desplaza sin pedir permiso y la boca se limita a pronunciar monosílabos sin ritmo o simples ruidos gesticulados.
Esos días que una mantas es la protección perfecta ante la inquietante mirada de una jungla desperada, que inconscientemente intuimos o sabemos con certeza que solamente nos quedan 5 minutos para que el insensible despertador nos haga volver a una realidad que no elegimos, para ser parte de esa jungla.
Siempre nos quedara una imaginación sin censura y sin ley.
Foto: Playa de Tulum (Caribe Mexicano) Fdo. Bopo10
No hay comentarios:
Publicar un comentario